Conocenos

Desde joven, sentí una fuerte inclinación hacia la justicia y la defensa de los derechos. Esta motivación inicial, que surgió en la secundaria, se consolidó con mi decisión de estudiar abogacía. Hoy, a mis 30 años, ejerzo esta profesión con la convicción de que el acceso a una representación legal sólida y comprometida es esencial para el bienestar de nuestra comunidad.

En mi labor diaria, pongo especial énfasis en la autonomía del cliente y en la comprensión profunda de su situación particular. Mi rol es el de una aliada estratégica, que ofrece claridad y acompañamiento en el proceso legal, en lugar de simplemente dictar un curso de acción. Me mantengo en permanente actualización sobre los avances y cambios en el ámbito jurídico, aplicando un enfoque riguroso y basado en la normativa vigente para cada caso que asumo.